La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Mi pueblo escuchame lo que voy a decirte
Solo sera un minuto si tienes que irte
No quiero digas nada simplemente escucha
Perdona si en un momento te interrumpa
Hoy hacen dos mill años fui crucificado
Mi cuerpo escupido y ensangrentado
Lleve todas tus culpas sobre mi costado
Para darte la vida eterna como un regalo
Y hoy surgen preguntas, porque no me escuchas
Porque no me miras, porque no me abrazas
La hipocresia a segado tu mente y dices que me amas
Te has hecho muy fuerte en tus razonamientos
Has cambiado mi gloria por tus sentimientos
Aveces por las noches vengo y te despierto
Pero ya no te importa hablarme un momento
Te pasas todo el tiempo hablando cosas vanas
Si la television, las modas o la fama
Has perdido la santida que en ti brillaba
Sabes mas de novelas que de mi palabra
Mi anhelo es usarte que muestres mi gloria
Llenarte de uncion y que rebose tu copa
Que cambies el mundo cada vez que hables
Pues el tiempo se agota... se agota
Recuerda cuando no estabas en mis brazos
Llorabas como un nino hambriento y descalzo
En camara lenta tu y yo nos juntamos
Las lagrimas caian bailando en un charco
Te di una nueva vida, te abri nuevas puertas
Llene tu corazon borrando la tristeza
Hoy dices que ya tienes hechas tus maletas
Te vas al mundo no importa que suceda
No puedes negar siempre estube contigo
Ojala que si vuelves yo no me haya ido
Entonces sera demasiado tarde y no podras encontrarme
Tus mejillas se gastaran de llorar por mi
Cuando recuerdes los momentos junto a ti
Tus mejillas se gastaran de llorar por mi
Cuando recuerdes los momentos junto a ti
Regresa a mi (a mi, regressa a mi), regresa a mi (a mi)
Regressa a mi (a mi), regressa a mi (a mi)