La música cristiana es de origen judÃo:​ la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judÃos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Dios mÃo, ¿dónde Tú estás?
Dime la verdad, si aún oyes mi oraciones.
(Dime la verdad).
Dime la verdad.
Perdona que te cuestione.
(Perdóname es que...).
Me pongo a pensar, a analizar, qué es lo que he hecho.
Miro pa'l cielo, mis oraciones no pasan el techo.
Dolor en el pecho, como quiera yo sigo pa'lante.
Con mis interrogantes, ¿en dónde estará mi Gigante?
Me persiguen y tropiezo, en mi espalda hay demasia'o de peso.
Lo confieso, espero salir ileso de este proceso.
Disculpa que tanto proteste, a veces quizá hasta moleste.
Solo quiero que atención me prestes y Tu gracia se manifieste.
¿Será que Tú estás muy ocupado, trabajando en otras situaciones?
No creo que me hayas olvidado, ¿o tal vez te fuiste de vacaciones?
Dime la verdad, si aún oyes mis oraciones.
Perdona que te cuestione y te pida explicaciones.
Dime la verdad, y es que tantas preocupaciones hacen que yo mal reaccione y flaqueen mis conviciones.
Dime la verdad, si Tú oyes mis peticiones, no mires mis condiciones, sino más mis intenciones.
Dime la verdad, si por mis malas decisiones y otras razones, te fuiste de vacaciones.
Y es que... mi mente se agota, más los pensamientos me azotan.
Le sirves al Dueño del oro, pero sigues en bancarrota.
Trato de crecer y más mermo, pensando en esto yo no duermo.
Si mi Dios todito lo puede, entonces ¿por qué mi hijo sigue enfermo?
No te encontré en mi cuarto, no te encontré en la iglesia.
Dime si estás en Nueva York, en Punta Cana, si estás en Venecia.
No puedo más, lo repito.
Suento un silencio infinito.
Dios mÃo, dime dónde andas; si es lejos yo te visito.
Recapacito, dije cosas que no debÃa, lo admito, y si mi clamor es débil, entonces más fuerte te grito.
Te necesito, Dios mÃo, responde que te necesito.
Y aunque yo haya dudado de Ti, sigo creyendo en lo que Tú has escrito...
¿Por qué te abates, alma, dentro de m�
(¿Por qué te abates?).
¿Por qué no amaneces un nuevo dÃa?
Espera en Dios, mi salvación está ahÃ.
Tú prometiste conmigo siempre estarÃas.
Dime la verdad, si aún oyes mis oraciones.
Perdona que te cuestione y te pida explicaciones.
Dime la verdad, y es que tantas preocupaciones
Hacen que yo mal reaccione y flaqueen mis conviciones.
Dime la verdad, si Tú oyes mis peticiones.
No mires mis condiciones, sino más mis intenciones.
Dime la verdad, si por mis malas decisiones y otras razones te fuiste de vacaciones.
Y es que, ¿a quién no le ha llegado el momento de frustación donde pensamos que Dios se fue de vacaciones y no nos está escuchando?
¿Pero sabes qué? Aún en ese silencio, �l sigue trabajando en cada uno de nosotros.
Solo confÃa en Ã?l y Ã?l hará.
Ã?l prometió que iba a estar con nosotros en cada dÃa de nuestras vidas.