La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Tengo un carro viejo que no quiere prender
Ya ni las ventanas suben, no sé qué voy a hacer
Ayer me llamaron para decirme: Juan
Ya no vengas al trabajo, estamos por quebrar
Tengo a mi hijo enfermo en el hospital
No le dan más esperanza; no, no puedo más
Sólo con mis hijos he tenido que luchar
¿Por qué se fue mi amor? Me siento solo, quiero calor
Corazón vuelve ya, que Dios te espera en la puerta
Él te quiere abrazar, Él extraña tu presencia
Si Él cuida de las aves y nunca olvida las flores
Mucho mas Él cuidara de ti
Tú respuesta está en decirle que sí
Tengo mucho dinero, pero no sé que hacer
Perdí a mi familia, en lo mucho me ocupé
Siento un vació que me lleva a un abismo
Las drogas me han consumido, ya no sé qué hacer
Corazón vuelve ya, que Dios te espera en la puerta
Él te quiere abrazar, Él extraña tu presencia
Si Él cuida de las aves y nunca olvida las flores
Mucho mas Él cuidara de ti
Tú respuesta está en decirle que sí
Corazón vuelve ya, que Dios te espera en la puerta
Él te quiere abrazar, Él extraña tu presencia
Si Él cuida de las aves y nunca olvida las flores
Mucho mas Él cuidara de ti
Tú respuesta está en decirle que sí
Tengo un carro viejo que no quiere prender
Ya ni las ventanas suben, yo sé qué voy a hacer