La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
El Jardín de Los Suicidas Espejos Muertos
Pisando los jardines al amanecer y el reflejo de la luna
da en mi lápida infeliz...
Doy la espalda a mi tumba, al compás de los lamentos...
Es que lucimos tan tétricos...!!!
Volamos, saltamos, cambiamos de compás
Dos almas en pena se besan al chocar...
Arrastran sus cadenas irán directo al mar
Las almas que se hunden bailan en la oscuridad...
Al caer la noche golpean mi ventana
Almas en pena engrilladas a su fiel pasado
Chocan contra la pared de mi interior
Al muro del lamento quejumbrosas del pesar…
Es que lucimos tan tétricos...!!!
Jugamos, bailamos, adornamos el lugar
La soga está en el árbol, que cómodo cajón...
El revólver en tu mano bajo la almohada no hay lugar
Las almas que se hunden bailan en la oscuridad...