La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Se que tienes, mucho que atender
Pero mi mundo se destruye y no sabemos que hacer…
Alguien me dijo, que una oración la diferencia puede hacer
Por eso vine a ti
Por que este mundo es mi casa, necesitamos de ti…
Tengo fe en ti, creo que las cosas, pueden cambiar
El mundo llora aquí pero tú nos puedes volver hacer reír……
Tu que estas allá y nosotros aquí
Ven visítanos te ruego haz nos sonreír…
Tengo fe en ti, creo que las cosas, pueden cambiar
El mundo llora aquí pero tú nos puedes volver hacer reír……
Tú que estas allá y nosotros aquí
Ven visítanos te ruego haz nos sonreír…
Tú que estas allá y nosotros aquí
Ven visítanos te ruego haz nos sonreír…
Tú que estas allá….