La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Sino hubiera infierno, sino huiera infierno
sino hubiera infierno, sino hubiera infierno
sino hubiera infierno, sino hubiera infierno.
coro
si no hubiera infierno igual te amaria
mi corazon arde de amor por ti senor;
ni las muchas aguas en mi ahogarian
la llama de tu inmenso amor.
estrofa
venimos hoy a ti sabiendo que tu oido se a
inclinado a este lugar,
que hayamos gracia Dios
para acercarnos cada dia mas.
venimos hoy a ti sabiendo que tu oido se a
inclinado a este lugar,
que hayamos gracia Dios
para acercarnos cada dia mas.
si no hubiera infierno, igual te amaria,
si no hubiera infierno, igual te amaria,
si no hubiera infierno,//igual te amaria//