La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Rey de justicia
Rey de verdad
Rey de salvación
Rey de salvación
Yo quiero subir
Al monte de sión
Contigo habitar
Por la eternidad
Tu abriste el camino
Que lleva hacia el padre
Entregaste tu vida
Derramaste tu sangre
Rey de justicia
Rey de verdad
Rey de salvación
Rey de salvación
Marcaste la historia
Con tu salvación
Quitando el pecado
Que nos separo
Y abriste el camino
Que lleva hacia el padre
Entregaste tu vida
Derramaste tu sangre
Rey de justicia
Rey de verdad
Rey de salvación
Rey de salvación
Establece tu reino
En nuestras vidas
Asienta tu trono
En nuestros corazones
Y abriste el camino
Que lleva hacia el padre
Entregaste tu vida
Derramaste tu sangre
Rey de justicia
Rey de verdad
Rey de salvación
Rey de salvación
Rey de salvación
Rey de justicia
Rey de justicia
Rey de salvación
Rey de salvación
Rey de salvación
Y abriste el camino
Que lleva hacia el padre
Entregaste tu vida
Derramaste tu sangre