La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Me duele el saber que en otros brazos
Hoy celebres mi fracaso
Sin importarte mi dolor
Me duele que se termine
Asi esta historia
Y el saber que fui un idiota
Al entregarte el corazon
Pero te juro que tarde o temprano
Pagaras tu error
Lloraras
Maldeciras el dia en que dijiste adios
Lamentaras haberme roto el corazon
Y sufriras de amor
Seran tus noches
Un infierno sin final
Y rogaras que por tu amor
Tenga piedad
Pero lo siento amor
No te voy a perdonar
No te voy a perdonar
Y lloraras
Me duele que se termine
Asi esta historia
Y el saber que fui un idiota
Al entregarte el corazon
Pero te juro que tarde o temprano
Pagaras tu error
Lloraras
Maldeciras el dia en que dijiste adios
Lamentaras haberme roto el corazon
Y sufriras de amor
Seran tus noches
Un infierno sin final
Y rogaras que por tu amor
Tenga piedad
Pero lo siento amor
No te voy a perdonar
No te voy a perdonar
Y lloraras
Lloraras
Maldeciras el dia en que dijiste adios
Lamentaras haberme roto el corazon
Y sufriras de amor
Seran tus noches
Un infierno sin final
Y rogaras que por tu amor
Tenga piedad
Pero lo siento amor
No te voy a perdonar
No te voy a perdonar
Y lloraras