La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
De lo alto del cielo y profundo del mar
creación que revela su majestad (oh oh oh)
primavera y otoño hablan de tí
la criatura le alaba y canta sin fin.
¡Exclamando!, el Gran Creador no hay descripción
cada estrella en el cielo su nombre le dio, maravilloso Dios
poderoso Dios no hay otro Dios
con humildad nos postramos al darle honor, maravilloso Dios.
El gran rayo obedece al son de su voz
y la nieve del cielo que con su esplendor
al sol dice que brille y dé su calor
y en la noche lo oculta y frescura nos da.
¡Exclamando!, el Gran Creador no hay descripción
cada estrella en el cielo su nombre le dio, maravilloso Dios
poderoso Dios, no hay otro Dios
con humildad nos postramos al darle honor, maravilloso Dios.
Al sol dice que brille y de su calor
y en la noche lo oculta y frescura nos da
el Gran Creador no hay descripción
cada estrella en el cielo su nombre le dio, maravilloso Dios.
Poderoso Dios, no hay otro Dios
con humildad nos postramos al darle honor, maravilloso Dios
el Gran Creador no hay descripción
cada estrella en el cielo su nombre le dio, maravilloso Dios.
Poderoso Dios, no hay otro Dios
con humildad nos postramos al darle honor, maravilloso Dios
maravilloso Dios.