La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Tuve un raro sueño que me puso a pensar
Que ya conocía un extraño lugar
Jamás lo había visto pero sé que estado allí
En alguna vida sé que lo conocí
Conozco ese lugar sé que estado allí
De alguna forma lo tendré que descubrí
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Tal vez yo fui un demonio de la oscuridad
Y por eso estaba en ese lugar
Seguiré buscando hasta descubrir
¿Por qué es que sé? Que había estado allí
Conozco ese lugar se que estado allí
De alguna forma lo tendré que descubrí
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Deja vú, deja vú
Este es mi deja vú
Oh oh oh
Oh oh oh
Oh oh oh
Oh oh oh