La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Todo ojo le verá
Todo ojo le verá
Y toda rodilla se doblará
Toda rodilla se doblará
/Viene en las nubes, poderoso y santo
Montado en un caballo blanco
Viene el rey Jesús en toda majestad
Se abre los cielos todo ojo le verá/. (Y viene)
El que ha de venir vendrá
El que ha de venir vendrá
Su cumplimiento está cerca ya
Su cumplimiento está cerca ya
(Y viene)
/Viene en las nubes, poderoso y santo
Montado en un caballo blanco
Viene el rey Jesús en toda majestad
Se abre los cielos todo ojo le verá/. (Y viene)
//Gloria, gloria, todo ojo le verá//
Viene en las nubes montado en un caballo blanco
//Gloria, gloria, todo ojo le verá//
Viene en las nubes montado en un caballo blanco
(Gracias a Jose Olivero por esta letra)