La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Ayer sentí temor, y hoy no lo siento
Ayer buscaba paz, más hoy la encuentro
Ayer estuve solo y hoy tú estas aquí
Ayer sentí morir y hoy vivo en ti
En medio del dolor, tú me levantas
Y en mi debilidad, tú me levantas
Y aun en la enfermedad, tú me levantas
Cuando no puedo más, tú me levantas
Porque tu poder se manifiesta aquí en mi vida
Y tu misericordia, mi señor, es nueva cada día
Tú me levantas
Ayer sentí temor, y hoy no lo siento
Ayer buscaba paz, más hoy la encuentro
Ayer estuve solo y hoy tú estas aquí
Ayer sentí morir y hoy vivo en ti
En medio del dolor, tú me levantas
Y en mi debilidad, tú me levantas
Y aun en la enfermedad, tú me levantas
Cuando no puedo más, tú me levantas
Porque tu poder se manifiesta aquí en mi vida
Y tu misericordia, mi señor, es nueva cada día
En medio del dolor, tú me levantas
Y en mi debilidad, tú me levantas
Díceselo al Señor
Tu poder señor se manifiesta aquí en mi vida
Y tu misericordia mi señor es nueva cada día
En medio del dolor, Señor, tú me levantas