La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Soy Colibrí Nana Luz
Libo amapolas
Y lirios también
Rosales florecen
Y huelen muy bien
Y a los tulipanes
Doy besos de miel
Soy colibrí
Beso a las flores
Me gusta a mí
Llenar de sabores
Todo el jardín
Y tú junto a mí
Canto con notas
Que te hacen sentir
Trabajo con sueños
De olor a jazmín
Regalo mis besos
Y yo soy feliz
Soy colibrí
Muevo mis alas
Para volar
Hasta tu casa
En el jardín
No me alejo de ti
Soy colibrí
Beso a las flores
Me gusta a mí
Llenar de sabores
Todo el jardín
Y tú junto a mí
Soy colibrí
Muevo mis alas
Para volar
Hasta tu casa
En el jardín
No me alejo de ti