La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Nunca, nunca estarás solo, no
cuando tu alma pide a gritos
y tus ojos húmedos están.
Nunca pienses que estás solo, no.
CORO:
No, no, no, nooo...
No estás solo, nooo...
Mira a tu alrededor
aunque no lo veas hoy.
Mi Dios contigo caminando va...
Mira a tu alrededor
aunque no lo veas hoy.
Sigue, sigue hablando la verdad
cargando valijas pesadas.
Paz y Luz se logran con sudor,
hablaré al mundo cuán grande es tu Dios.
CORO:
No, no, no, nooo...
No estás solo, nooo...
Mira a tu alrededor
aunque no lo veas hoy.
Mi Dios contigo caminando va...
Mira a tu alrededor
aunque no lo veas hoy.
Mira, mira cómo sale el sol
cuando tu mar Rojo se abre.
ÉL es fiel y justo como ayer,
ÉL hara que el sueño se cumpla para vos.
CORO:
No, no, no, nooo...
No estás solo, nooo...
Mira a tu alrededor
aunque no lo veas hoy.
Mi Dios contigo caminando va...
Mira a tu alrededor
Nooo...