La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Vamos hay que subir
Al monte del señor
Donde el dios de jacob habita
Vamos hay que subir
Al monte del señor
Donde el dios de jacob habita
Y la ley saldrà desde siòn
La palabra de dios de jeru - sa - lèn
Caminemos en sus pasos
Nos enseñarà a vivir
El juzgar toda alma
Reprendiendo las naciones
Con poder
Seràn vueltas en arados las
Espadas
En la tierra no habrà guerra
Jamàs