La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Como un barco a la deriva estás,
sin poder hallar salida.
Todo lo que haces te conduce a un mal final.
¡Basta ya!.
La televisión te hizo mal,
piensas que todo es un juego.
Tu rutina se compone en el placer y nada más.
¡Basta Ya!.
Ya no puedes vivir así,
no debes jugar con tu vida.
Buscas la verdad ilusoria,
que no ha de venir.
Angosto es el camino,
angosto es el camino a la vida,
tú lo sabes.
Se abre una puerta,
se extiende una mano, que puede ayudarte.
Mira como el mundo se deja llevar,
por emociones lo que ven o por modalidad.
Mira que la gente ignora el amor, tienes que salir del error.
¡Basta ya!.
Todo está cumplido,
es el tiempo que lo aceptes.
No sigas con tu juego, el que ha de venir, vendrá.