La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
El Amor No Tiene Precio El Amor No Tiene Precio
Desde el momento en que te vi,
de este amor fui prisionero,
Tan bella fue esta boca de carmín, ,
que me enamoré de ti,
El amor no tiene precio,
Tu fuiste como un ángel para mí, ,
que cayó del firmamento
Detrás de tu perfume me perdí, ,
enloquecido estoy por ti.
Con tus caricias me haces temblar... de placer ,
Tenerte cerca es un paraíso, ¿quién puede pedir más?
Junto a ti... El amor no tiene precio,
Bendito el momento que rocé, con tu cuerpo
Y junto a ti... El amor no tiene precio,
Enciendes toda mi pasión... como el fuego.
No sé resistirme a tu calor, ,
que quema como el mismo infierno
Cómo no quiere él amarte más, ,
Si eres pura, sensual, vida
El amor no tiene precio
Con tus caricias me haces temblar... de placer ,
Tenerte cerca es un paraíso, ¿quién puede pedir más?
Junto a ti... El amor no tiene precio,
Bendito el momento que rocé, con tu cuerpo,
Y junto a ti... El amor no tiene precio,
Enciendes toda mi pasión... como el fuego.
Junto a ti... El amor no tiene precio,
Bendito el momento que rocé, con tu cuerpo
Y junto a ti... El amor no tiene precio,
Enciendes toda mi pasión... como el fuego