La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Não sei quando começou
E nem onde vai parar
Mas se eu vejo um sinal da Tua sombra
É lá que eu quero estar
Eu sei que falta um tempo pra que a gente
Passe a eternidade aos Teus pés
Enquanto a gente vive e gira
Em torno do sol
Eu só, te peço
Da una vuelta más
Solamente una vuelta
Da una vuelta más
Solamente una vuelta
No sé cuando empezó
Y donde va parar
Pero si veo una señal de Tu sombra
Es ai que quiero estar
Eu sei que falta um tempo pra que a gente
Passe a eternidade aos Teus pés
Enquanto a gente vive e gira
Em torno do sol
Eu só, te peço
Da una vuelta más
Solamente una vuelta
Da una vuelta más
Solamente una vuelta
Da una vuelta más
Solamente una vuelta
Da una vuelta más
Solamente una vuelta