La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Bala Perdida Miguel Aceves Mejía
No es que no te quiera si ya no te sigo besando.
La cruz no pesa lo que cala
Son los filos, cariño santo
Cariño santo, yo no te dejo
Ni aunque me griten, ni aunque me griten
Que ya me estás, que ya me estás
Que ya me estás acabando.
Las balas perdidas pegaron siempre en mi pecho.
Pero tus besos me inyectaron
Nueva vida, bala perdida
Bala perdida bien haya el mauser
Que te ha tronado, que te ha tronado
Para acabar, para acabar
Para acabar con mi vida.
Cuatro despedidas las tengo para tí escritas.
Y ahí te las dejo pa' que llores
Cuando te diga bala perdida
Bala perdida y a mano estamos
Y aquí murió, y aquí murió
Y adiós, adiós, y adiós, adiós
Que tengas suerte en tu vida.