La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Cómo recuerdo tus ojos
Entre mis brazos viéndolo todo
Por primera vez
Te juré proteger
Pasaron los años
Se volvieron rojos
Traté de hallarte en recuerdos llorosos
Fallé
Tu ya no estas
Aquí estoy
Mi amor
Espérame
Te voy a encontrar
Esta vez
Amor
Donde estés
Te voy a encontrar
Saliste en la tarde a la misma hora
Me culpé siempre por dejarte ir sola
Perdón
Solo puedo llorar
Extraño tu rostro en las mañanas
Ahora solo busco por las montañas
Tu piel
Entre el café
Por Dios
Mi amor
Te extraño
No te puedo encontrar
Lo juré
Amor
Viva o no
Te voy a encontrar
Te voy a encontrar
Te voy a encontrar