La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
No tengo poemas
Ni frases de Neruda
Solo un corazón que te ama
No he encontrado canciones
Que cien por ciento definan
Lo que por ti siente mi alma
Volar me pone nervioso
Pero contigo quiero viajar
No importa el lugar
No necesitamos mucho
Solo nuestras manos tomar
¡...Y soñar!
La verdad no me importa
Si no tenemos lujos
Quiero mi corazón junto al tuyo
En los buenos tiempos
Y los momentos duros
Tú y yo seremos siempre uno
Volar me pone nervioso
Pero contigo quiero viajar
No importa el lugar
No necesitamos mucho
Solo nuestras manos tomar
¡...Y soñar!
No necesitamos mucho si estamos juntos
No necesitamos mucho si estamos juntos