La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
No, yo no sé si pueda olvidar lo que vi aquel día
Una belleza nunca conocida
Es un privilegio ver, su nombre quiero saber
Fue una condena, que sólo al pestañear
Como una sirena, se me perdió dentro del mar
Si pudiera regresar el tiempo
Desde aquella vez, nunca la volví a ver
Se fue y nunca la volví a ver
Ella se fue y nunca la volví a ver
Ella se fue y nunca la volví a ver
Ella se fue, solo desa-pare-ció
(Sólo desa-pare-ció)
(Sólo desa-pare-ció)
Cómo podré olvidarte
Si tu recuerdo es lo que me hace vivir ooh
Te he buscado ya en todas partes
Y no sé cuanto más pueda seguir ooh
Fue una condena, que sólo al pestañear
Como una sirena, se me perdió dentro del mar
Si pudiera regresar el tiempo
Desde aquella vez (desde aquella vez), nunca la volví a ver
Se fue y nunca la volví a ver
Ella se fue (ella se fue) y nunca la volví a ver
Ella se fue y nunca la volví a ver
Ella se fue, solo desa-pare-ció
(Sólo desa-pare-ció)
(Sólo desa-pare-ció)
Ey Wiso Rivera
Ra-Rauw Alejandro
Necesito tenerte
To'as las bellaco, que pasan por mi mente
Tú arriba, gritando mi nombre
Donde diablo estás, dime por qué te escondes
Necesito tenerte
To'as las bellaco, que pasan por mi mente
Tú arriba, gritando mi nombre
Donde diablo estás, dime por qué te escondes