La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Este mundo puede ser un sitio lindo y a la vez,
Duro, desabrido, difícil de entender,
Y en la marcha día a día se agota la fe,
De quien se escapa de sus manos la razón de ser.
Buscas, buscas el sentido a tu existencialismo,
Giras, giras en un ciclo de insatisfacción.
Busca a dios.
Y aunque nunca entenderemos todos los misterios,
Sean gratos, sean malos o injustos
Solo se que cuando veo un niño,
Veo un milagro, veo la creación,
Me asombro y caigo de rodillas ante el cielo.
Buscas, buscas el sentido a tu existencialismo,
Giras, giras en un ciclo de insatisfacción.
Buscas, buscas tantas cosas...
Giras, giras en un ciclo de insatisfacción.
Busca a dios.
Busca a dios.
Busca a dios.