La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Qiuero perderme contigo en la noche
Para cantarte bajo las estrellas
Y recitarte poemas de amores
Tu y yo iluminados por la luna llena
Porque tu eres dueña de mis ilusiones
Y sueño linda que tu seas mi reina
Que seas la musa para mis canciones
Y estés conmigo en la mala y la buena
Porque yo te quiero y me quieres Porque yo te adoro y me adoras
Porque yo entiendo y tu entiendes Que al fin nos llegó la hora
De hacer público este amor que por tiempo hemos callado
Vivir juntitos los dos Y estar siempre enamorados
Estar siempre enamorados Vivir juntitos los dos
Quiero llevarte a conocer el Valle
Y que te bañes conmigo en hurtado
Para que nunca puedas olvidarme
Y vivamos siempre muy enamorados
Conocer el parque de la leyenda
Y contemplar la imponente Nevada
Ver las mariposas allá en la Malena
Y volver felices a nuestra Sabana
Porque yo te quiero y me quieres Porque yo te adoro y me adoras
Porque yo entiendo y tu entiendes Que al fin nos llegó la hora
De hacer público este amor que por tiempo hemos callado
Vivir juntitos los dos Y estar siempre enamorados
Estar siempre enamorados Vivir juntitos los dos
Es que yo siento por ti una pasión
Que en la vida no he sentido por ninguna
Y cuando beso tus labios mi amor
Siento que voy derechito a la luna
Porque tus caricias me elevan del suelo
Como si fuera una nave espacial
En un instante me llevas al cielo
Y quedo flotando en esa inmensidad
Porque yo te quiero y me quieres Porque yo te adoro y me adoras
Porque yo entiendo y tu entiendes Que al fin nos llegó la hora
De hacer público este amor que por tiempo hemos callado
Vivir juntitos los dos Y estar siempre enamorados
Estar siempre enamorados Vivir juntitos los dos