La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
"Tu amor es tan dulce
no lo puedo resistir
vierte tu presencia sobre mi"
ven sobre mi Senor
quiero sentir tu poder y amor
vierte que tu amor que es mas dulce que la miel,
sana mi corazón herido
quiero sentirte al lado mio Senor, vierte de tu amor
"Tu amor es tan dulce
no lo puedo resistir
vierte tu presencia sobre mi"
ven sobre mi Senor
quiero sentir tu poder y amor
vierte que tu amor que es mas dulce que la miel,
sana mi corazón herido
quiero sentirte al lado mio Senor, vierte de tu amor
"Vierte de tu amor"
vierte que tu amor que es mas dulce que la miel,
sana mi corazón herido
quiero sentirte al lado mio Senor, vierte de tu amor
(Gracias a Michelle Rivera por esta letra)