La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
¿Están listos chicos?
¡Sí capitán, estamos listos!
¡No los escucho!
¡Sí capitán, estamos listos!
Uuuh
¡Vive en una piña debajo del mar!
¡Bob Esponja!
¡Su cuerpo absorbe y sin estallar!
¡Bob Esponja!
El mejor amigo que podrías desear
¡Bob Esponja!
Y como a un pez le es fácil flotar
¡Bob Esponja!
¡Todos!